Un poco de historia
Durante la primera mitad del siglo pasado en el pa?s circulaba el d?lar estadounidense. Para 1947 el dictador Rafael Le?nidas Trujillo fund? el Banco Central de la Rep?blica Dominicana, lo que marc? el inicio de la emisi?n de la moneda nacional, el mercado cambiario dominicano y, por consiguiente, las pol?ticas monetaria y cambiaria, las cuales permitieron a la instituci?n actuar como promotor del desarrollo e incentivar determinadas actividades econ?micas.
En la d?cada de los a?os 60 el Banco Central tom? una serie de medidas que aumentaron la escasez de divisas, lo que incentiv? la creaci?n de un mercado extra bancario que las proporcionaban a una tasa de cambio superior a la oficial.
No fue sino hasta 1982 que el tipo de cambio dej? de ser fijo, ya que hasta ese momento se hab?a mantenido a la par con el d?lar.
A finales de la d?cada de los a?os 70 una serie de factores ex?genos provocaron una crisis econ?mica y, posteriormente, dos intentos fallidos de estabilizaci?n (1982 y 1984). El deterioro de la coyuntura econ?mica cuestion? la viabilidad de las pol?ticas monetaria y cambiaria.
As?, durante el primer per?odo o fase de pol?tica cambiaria (1980-1985), definido por la CEPAL, se gener? una brecha promedio en la cuenta corriente de 4.8% del PIB, debido a una ca?da en los t?rminos de intercambio, cuyo comportamiento tuvo un efecto negativo en el sector exportador y, por tanto, en los ingresos del Gobierno Central, generando una brecha fiscal que se financi? mediante deuda externa, creciendo ?sta de 15% del PIB en el 1980 a 44.7% del PIB en el 1985.
Durante 1985 se realiz? otro programa de estabilizaci?n auspiciado por el FMI, que llev? a la unificaci?n cambiaria con el prop?sito del mejoramiento de la balanza de pagos, causando una depreciaci?n del tipo de cambio extra bancario de 44.5%.
Para el segundo periodo analizado (1986-1990), pese a los esfuerzos realizados, las medidas monetarias y cambiarias no lograron contener los desequilibrios macroecon?micos que empezaron a notarse a partir de 1987, lo que puso en entredicho la viabilidad del programa de estabilizaci?n y la eficiencia de las medidas.
En ese per?odo el d?ficit gubernamental estuvo acompa?ado de un d?ficit de cuenta corriente de 2.32% del PIB en promedio, debido al estancamiento de las exportaciones y el aumento de las importaciones que se sald? con una p?rdida de las reservas internacionales de 52.59% en 1989, lo que llev? a las autoridades a suspender el servicio de su deuda p?blica externa y a los proveedores a congelar el cr?dito del pa?s. Pese a los controles cambiarios el tipo de cambio extra bancario se depreci? arrastrando al tipo de cambio oficial.
Para 1990 la situaci?n econ?mica era insostenible, present?ndose aumentos en los d?ficit de cuenta corriente y fiscal, y deterioro en la posici?n de las reservas internacionales. Todo esto llev? a la puesta en marcha de un programa de estabilizaci?n a trav?s de la restricci?n del cr?dito interno neto y la utilizaci?n del tipo de cambio como ancla nominal.
Durante la primera mitad del siglo pasado en el pa?s circulaba el d?lar estadounidense. Para 1947 el dictador Rafael Le?nidas Trujillo fund? el Banco Central de la Rep?blica Dominicana, lo que marc? el inicio de la emisi?n de la moneda nacional, el mercado cambiario dominicano y, por consiguiente, las pol?ticas monetaria y cambiaria, las cuales permitieron a la instituci?n actuar como promotor del desarrollo e incentivar determinadas actividades econ?micas.
En la d?cada de los a?os 60 el Banco Central tom? una serie de medidas que aumentaron la escasez de divisas, lo que incentiv? la creaci?n de un mercado extra bancario que las proporcionaban a una tasa de cambio superior a la oficial.
No fue sino hasta 1982 que el tipo de cambio dej? de ser fijo, ya que hasta ese momento se hab?a mantenido a la par con el d?lar.
A finales de la d?cada de los a?os 70 una serie de factores ex?genos provocaron una crisis econ?mica y, posteriormente, dos intentos fallidos de estabilizaci?n (1982 y 1984). El deterioro de la coyuntura econ?mica cuestion? la viabilidad de las pol?ticas monetaria y cambiaria.
As?, durante el primer per?odo o fase de pol?tica cambiaria (1980-1985), definido por la CEPAL, se gener? una brecha promedio en la cuenta corriente de 4.8% del PIB, debido a una ca?da en los t?rminos de intercambio, cuyo comportamiento tuvo un efecto negativo en el sector exportador y, por tanto, en los ingresos del Gobierno Central, generando una brecha fiscal que se financi? mediante deuda externa, creciendo ?sta de 15% del PIB en el 1980 a 44.7% del PIB en el 1985.
Durante 1985 se realiz? otro programa de estabilizaci?n auspiciado por el FMI, que llev? a la unificaci?n cambiaria con el prop?sito del mejoramiento de la balanza de pagos, causando una depreciaci?n del tipo de cambio extra bancario de 44.5%.
Para el segundo periodo analizado (1986-1990), pese a los esfuerzos realizados, las medidas monetarias y cambiarias no lograron contener los desequilibrios macroecon?micos que empezaron a notarse a partir de 1987, lo que puso en entredicho la viabilidad del programa de estabilizaci?n y la eficiencia de las medidas.
En ese per?odo el d?ficit gubernamental estuvo acompa?ado de un d?ficit de cuenta corriente de 2.32% del PIB en promedio, debido al estancamiento de las exportaciones y el aumento de las importaciones que se sald? con una p?rdida de las reservas internacionales de 52.59% en 1989, lo que llev? a las autoridades a suspender el servicio de su deuda p?blica externa y a los proveedores a congelar el cr?dito del pa?s. Pese a los controles cambiarios el tipo de cambio extra bancario se depreci? arrastrando al tipo de cambio oficial.
Para 1990 la situaci?n econ?mica era insostenible, present?ndose aumentos en los d?ficit de cuenta corriente y fiscal, y deterioro en la posici?n de las reservas internacionales. Todo esto llev? a la puesta en marcha de un programa de estabilizaci?n a trav?s de la restricci?n del cr?dito interno neto y la utilizaci?n del tipo de cambio como ancla nominal.
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